El middleware es un programa informático utilizado para facilitar la comunicación y el intercambio de datos entre dos aplicaciones independientes. Actúa como intermediario entre dos aplicaciones independientes y sirve de puente de comunicación entre ellas. El middleware se utiliza habitualmente para permitir el desarrollo de aplicaciones distribuidas o para añadir características y funcionalidades adicionales a las aplicaciones existentes.
El middleware suele utilizarse en redes informáticas distribuidas. Proporciona una plataforma común para aplicaciones de distintas plataformas y les ayuda a interactuar sin problemas entre sí. También puede utilizarse para agilizar la comunicación entre sistemas cliente y servidor.
El middleware suele ser una capa entre un servidor de aplicaciones y una base de datos. Se comunica con la base de datos para acceder a los datos almacenados en ella y también puede utilizarse para gestionar los datos de una aplicación. También puede utilizarse para gestionar tareas como la seguridad, la autenticación y la transformación de datos.
El middleware puede dividirse en dos categorías: middleware a nivel de aplicación y middleware orientado a servicios. El middleware a nivel de aplicación se utiliza para permitir la comunicación entre dos aplicaciones en una sola máquina. El middleware orientado a servicios se utiliza para desarrollar aplicaciones distribuidas en varias máquinas, permitiendo la comunicación entre distintas plataformas.
El middleware puede implementarse de diversas formas. Algunos ejemplos son el middleware orientado a mensajes, los intermediarios de peticiones de objetos, la invocación remota de objetos, los servicios basados en web, las suites de integración de aplicaciones empresariales (EAI) y el middleware móvil.
El middleware es un componente esencial de la informática moderna. Permite que distintas aplicaciones interactúen, se conecten entre plataformas, accedan a servicios y datos y agilicen el desarrollo de aplicaciones distribuidas. Es una poderosa herramienta que aporta mayor flexibilidad y eficacia a las redes informáticas.