Un servidor proxy es un tipo especial de sistema informático o aplicación de software que actúa como intermediario entre un cliente y un servidor. Su propósito es proporcionar anonimato, seguridad y privacidad al usuario permitiendo el acceso a ciertos recursos o información en muchos ordenadores o redes.
Un servidor proxy recibe la petición de un cliente, la procesa y la reenvía al servidor. El cliente no se comunica directamente con el servidor, sino que la petición pasa por el servidor proxy y el servidor responde al proxy, que a su vez devuelve la respuesta al cliente. Esto permite al usuario eludir restricciones geográficas o de red, ocultar su dirección IP o acceder a sitios restringidos sin exponer su identidad.
Los servidores proxy también pueden utilizarse para mejorar el rendimiento y la seguridad almacenando en caché los contenidos más utilizados, impidiendo las comunicaciones malintencionadas y controlando el acceso de los usuarios.
Los servidores proxy pueden tener forma de aplicación, complemento o dispositivo especial. Se pueden clasificar en diferentes categorías, como proxies web, que se utilizan para acceder a sitios web; proxies de tunelización, que ocultan la dirección IP real del usuario; y proxies anónimos, que permiten a los usuarios navegar de forma anónima.
Las empresas, los gobiernos y los particulares utilizan servidores proxy para garantizar la seguridad, la privacidad y el acceso a los contenidos. También se utilizan para eludir la censura y el filtrado de contenidos, así como para mejorar la velocidad de una conexión.