Los usuarios domésticos suelen utilizar proxies por diversas razones. Con la ayuda de un servidor proxy, los usuarios domésticos pueden acceder a contenidos restringidos en servicios de streaming o a sitios web que normalmente están bloqueados en su país. Además, pueden disfrutar de una mayor privacidad y anonimato en línea, ya que los servidores proxy enmascaran las direcciones IP de los usuarios y cifran los datos transmitidos por Internet. También es posible saltarse los cortafuegos cuando se utiliza un servidor proxy desde la propia conexión en casa.
Los empresarios prefieren utilizar proxies porque les ayudan a obtener datos de mercado más rápidamente que los métodos manuales, al tiempo que mantienen su dirección IP oculta a la competencia. Los proxies también ofrecen a los empresarios un mayor control sobre el funcionamiento de las campañas en las redes sociales, ya que les permiten verificar los anuncios rápidamente sin tener que comprobarlos manualmente de forma individual. Por último, con la ayuda de los proxies, los empresarios pueden adelantarse a los defraudadores, ya que podrán controlar las actividades sospechosas mucho más fácilmente que antes.